Primera etapa de nuestro viaje desde Ferrol hasta Santiago de Compostela por el Camino Inglés.
Iniciamos la andadura en el puerto de Curuxeiras, en Ferrol, donde se encuentra la marca que da inicio al camino inglés y la oficina del Peregrino donde podemos conseguir nuestra credencial. Si queremos, antes de empezar podemos visitar a escasos metros el Baluarte de San Juan, que data del s. XVIII y formaba parte del amurallado de la ciudad. Actualmente se trata de un parque que cuenta con un monumento conmemorativo de la batalla de Brión en la que los ferrolanos defendieron las costas del ataque de los ingleses.
Una vez empezamos a caminar, nos encontramos con un primer tramo urbano. Tras los primeros cruces en los que nos iremos familiarizando con la señalización del Camino (vieira y flecha amarillas sobre fondo azul) y «sufriremos» la primera cuesta, llegaremos a la Iglesia de San Francisco, de estilo neoclásico y construída en el s. XVIII. Seguiremos por la Calle Real, pasando por la plaza de Amboage para llegar a la renovada Plaza de Armas, donde podemos ver el edificio del Ayuntamiento de Ferrol. Descendemos hacia el Cantón y en la Calle Tierra nos encontramos con el ya mítico «makako» de Ferrol Mola y el «perro croqueta». Desde aquí, siguiendo aún por zona urbana, pasaremos por Navantia y el Cuartel de Dolores para llegar al barrio de Esteiro. Un poco más adelante, al lado del Auditorio de Ferrol, nos apartamos de la carretera para acercarnos por fin al mar.
Seguiremos todo el paseo marítimo de Caranza disfrutando de las vistas hasta llegar al polígono industrial, que bordearemos también por una senda de paseo. Casi al final del polígono, encontraréis uno de los múltiples establecimientos de hostelería que anuncian que en su interior se sella la credencial del peregrino. ¡Recordad ir reuniendo sellos en vuestras paradas!
Desde aquí, el Camino nos lleva por zonas de campos de cultivo y urbanizaciones para acabar un marcado descenso en el Monasterio de San Martiño de Xubia, que data en alguna de sus estructuras del s. XII. Continuamos bordeando la ría de Ferrol hasta llegar al paseo de Xubia. Aquí nos encontraremos con una bifurcación señalizada que nos indica que podemos continuar por el Camino principal o realizar un pequeño tramo complementario (aprox. 1.4km) que nos permite visitar el molino de As Aceas, declarado Real Fábrica de harina por Carlos IV. En cuanto finalizamos este tramo, volvemos al paseo marítimo de Xubia, donde podemos disfrutar de unos grafitis de reciente creación con temática del Camino. Un poco más adelante encontraremos el mojón que nos indica que estamos a 100km exactos de Santiago de Compostela.
Siguiendo el paseo de Xubia llegaremos al fondo de la ría y cruzaremos el puente para pasar a la otra orilla, ya en el ayuntamiento de Neda. A escasos metros podemos ver el Albergue de Peregrinos de Neda, donde podemos detener nuestra etapa o aprovechar los parques del paseo marítimo para tomarnos un descanso. Nosotros hicimos un pequeño alto en el camino para tomarnos un bocadillo y descansar las piernas. Recordad que en los albergues también se puede sellar la Credencial.
Si continuamos nuestro paseo, atravesaremos Neda pasando por el templo de Santa María (s. XVIII), la casa consistorial y la torre del Reloj (levantada sobre los restos de un antiguo hospital de peregrinos del s. XVI). Merece la pena apartarnos unos metros del Camino para visitar la Iglesia de San Nicolás y ver la increíble escultura de homenaje al Peregrino, obra del artesano Carlos García Romero y tallada con motosierra directamente del tronco de la araucaria que presidía el atrio de la iglesia.
Visto esto, proseguimos el camino y llegamos a Fene, que nos ofrece las primeras cuestas difíciles (con fantásticas vistas de la ría y de los pasos que ya hemos dado) y los primeros tramos de Camino entre bosques. Como curiosidad, en medio de uno de estos tramos nos encontramos lo que podríamos considerar uno de los primeros «puestos de souvenirs» de este Camino Inglés, en el que el peregrino puede comprar un pequeño recuerdo depositando en la caja la voluntad. También existen otros pequeños puestos a lo largo del camino donde los lugareños dejan fruta o agua a los peregrinos para ayudarles a reponer fuerzas.
Tras el ascenso entre eucaliptos llegamos al polígono industrial de Vilar do Colo, donde podemos seguir el trazado oficial del Camino (modificado por la Xunta de Galicia en 2017, que en este caso nos lleva pegados a la carretera nacional y posteriormente por carreteras secundarias) o seguir el antiguo trazado, que nos adentra por zonas boscosas y pistas forestales hasta llegar al ayuntamiento de Cabañas, pudiendo disfrutar de la playa de la Magdalena y su pinar antes de entrar en Pontedeume por el puente de piedra de 15 arcos que data de 1870. En caso de optar en esta u otras etapas por trazados alternativos (punto que con nuestra experiencia recomendamos totalmente), aseguraos de contar con un mapa, track o aplicación móvil que os guíe, ya que suelen ser rutas que están peor señalizadas aunque conservan la señalización antigua.
Acabamos esta primera etapa en Pontedeume con la visita al Torreón de los Andrade (s. XIV), donde hoy en día se ubica la oficina de turismo y a los pies del cual, al lado del puerto, se encuentra el albergue de peregrinos. Si te quedan fuerzas y tiempo, puedes aprovechar para visitar toda la villa de Pontedeume.
Como os explicamos el primer día, las etapas del Camino se pueden adaptar «al gusto». En el caso de esta, en las diferentes guías vemos que se puede finalizar en Neda (13km), Fene, Cabañas o como en nuestro caso en Pontedeume.
Mañana a las 19h viajaremos desde Pontedeume a Betanzos. ¿Te vienes?